El Ayuntamiento de Brihuega quiere poner en valor y proteger, junto a FADETA, su patrimonio natural más preciado: la lavanda y el paisaje de la Alcarria. El documental “Lavanda, esencia de un cambio” que se encuentra en fase de adjudicación, forma parte de un plan que pretende culminar con la denominación de Paisaje Cultural por la UNESCO.
La Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural aprobada por la Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en su 17ª reunión celebrada en París, el 16 de noviembre de 1972 definía como paisaje cultural como “la obra combinada de la naturaleza y el hombre” y se seleccionan “sobre la base de su valor universal sobresaliente y de su representatividad en términos de una región geocultural claramente definida y, en consecuencia, por su capacidad para ilustrar los elementos culturales esenciales y distintivos de dichas regiones”.
Requisitos que el cultivo de la lavanda y la comarca de Brihuega cumplen con creces, habiéndose producido una simbiosis cultural entre el municipio y el cultivo, que define y
caracteriza ya a la villa como tierra de lavanda.
El documental, que salió a concurso en noviembre bajo el auspicio de FADETA, tendrá como objetivo dar a conocer la repercusión que ha tenido en la provincia de Guadalajara y en la comarca de Brihuega en particular, el cultivo y procesamiento de la lavanda, teniendo en cuenta los aspectos económicos, culturales y sociales.
Luis Viejo, alcalde de Brihuega, lleva ya un tiempo trabajando en defensa del cultivo y de todo lo que supone para la provincia y su plan es alcanzar la denominación de Paisaje Cultural de la UNESCO junto a otras administraciones
Para Viejo, “el paisaje es un elemento social, económico y cultural de primer orden que hay
que proteger”. Cabe recordar que en estos momentos, el cultivo de la lavanda ocupa 2.940 hectáreas en la provincia de Guadalajara y 5.000 en toda Castilla-La Mancha; hay más de 120 productores en
68 municipios, la mayoría de ellos de Guadalajara y el sector da empleo a más de un millar de personas.
